Dani Sordo es un excelente piloto en asfalto y un piloto que va cada vez aprendiendo más sobre la tierra, como demuestran sus últimas actuaciones, en las que ha sido capaz de proteger las espaldas de un fuera de serie como Sébastien Loeb frente a los ataques de toda una legión de Ford Focus.
Sebastien Ogier no ha digerido el éxito
Vista la actual situación de la economía mundial y del Mundial y del equipo Citroën en particular, la máxima de Dani Sordo esta temporada era renovar su contrato con la marca francesa consciente de que la época ya no está para correr con maletín a menos que tengas una mina de diamantes. Que los asientos oficiales son cuatro y que sólo tres cobran un sueldo, así de claro. Su mayor problema venía de la emergente estrella francesa Sébastien Ogier, pero el campeón del mundo junior 2008 no ha digerido el éxito ni la borrachera de su espectacular debut en el Rally de Gales del año pasado al volante de un C4 WRC. Tras disputar las seis primeras citas de la temporada, Ogier apenas ha sido sexto en Irlanda y séptimo en Argentina, con errores garrafales de conducción entre ambas citas.
El español es todo un piloto de equipo