Se trata de un óvalo de cuatrocientos metros en el que los coches van casi la mitad del recorrido derrapando. Es conducción pura, de auténticos maestros. Y el mejor en el Trofeo Andros es Alain Prost. El Profesor, ganador de cuatro títulos mundiales de Fórmula 1, logró este fin de semana en el Estadio de Francia, ante 65.000 espectadores, su tercer título en la especialidad.
Se celebraban los 20 años desde que en Serre Chevalier se disputase la primera prueba del Andros, con victoria del Citroën Visa de Alain Froment. Desde entonces, han sido muchos los deportistas franceses que han participado en esta competición sobre hielo que se disputa en algunas de las mayores estaciones invernales del país vecino. Desde la tenista Amelie Mauresmo, al ciclista Laurent Fignon o el futbolista Bixente Lizarazu pasando por los dakarianos Hubert Auriol o Stephane Peterhansel y el también esquiador Luc Alphand.
También ha habido grandes estrellas del mundo del motor que se han puesto a los mandos de estos vehículos especialmente diseñados para superficies deslizantes y equipados con neumáticos de clavos. Lo mejor del automovilismo francés, entre ellos Sebastien Loeb, que estuvo en París acompañando a Prost en la imagen de los dos mejores deportistas franceses del motor de todos los tiempos. El campeón de rallys ofreció una exhibición con su imponente Citroën C4 WRC.
En la carrera final del campeonato, la superfinal del año, volvió a vencer Prost junto a Olivier Panis, el último piloto francés de F-1 hasta que este año regresen los galos a los circuitos con Sebastien Bourdais. Finalmente ocho pruebas con visitas a Alpe D?Huez o Grandvalira, en Andorra. De ese pequeño país es Aurelia Martí, la mejor de las mujeres con un BMW Serie 1.Se celebraban los 20 años desde que en Serre Chevalier se disputase la primera prueba del Andros, con victoria del Citroën Visa de Alain Froment. Desde entonces, han sido muchos los deportistas franceses que han participado en esta competición sobre hielo que se disputa en algunas de las mayores estaciones invernales del país vecino. Desde la tenista Amelie Mauresmo, al ciclista Laurent Fignon o el futbolista Bixente Lizarazu pasando por los dakarianos Hubert Auriol o Stephane Peterhansel y el también esquiador Luc Alphand.
También ha habido grandes estrellas del mundo del motor que se han puesto a los mandos de estos vehículos especialmente diseñados para superficies deslizantes y equipados con neumáticos de clavos. Lo mejor del automovilismo francés, entre ellos Sebastien Loeb, que estuvo en París acompañando a Prost en la imagen de los dos mejores deportistas franceses del motor de todos los tiempos. El campeón de rallys ofreció una exhibición con su imponente Citroën C4 WRC.
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